Se ha identificado una vulnerabilidad crítica que afecta a los principales navegadores web, denominada "0.0.0.0 day". Esta falla permite que sitios web maliciosos aprovechen la dirección IP 0.0.0.0 para comunicarse con servicios locales en dispositivos, lo que podría llevar a la ejecución remota de código y al acceso no autorizado a redes locales.
El problema radica en cómo los navegadores manejan las solicitudes de red. Navegadores como Google Chrome, Mozilla Firefox y Apple Safari son susceptibles a este ataque en sistemas macOS y Linux, mientras que los dispositivos Windows están protegidos debido a las políticas de bloqueo de IP a nivel del sistema operativo.
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